A más de 120 días del violento incidente en el Colegio Frida Kahlo, ubicado en Cuautitlán Izcalli, Estado de México, la madre del menor y que golpeó físicamente a la maestra, Laura, quien actualmente se encuentra en el Penal de Barrientos, rompió el silencio y responsabilizó a los medios de comunicación por su situación en prisión. La mujer, acusada de golpear a una maestra, justificó sus acciones argumentando que estaba “defendiendo” a su hijo de presuntos maltratos en la institución educativa.

Durante una entrevista para el podcast “Penitencia” de la abogada y activista Saskia Niño de Rivera, Laura aseguró que no se arrepiente de las agresiones perpetradas contra la maestra Brenda, a quien agredió tras encontrar una herida en el brazo de su hijo, supuestamente causada por maltrato.

LAMENTABLE AGRESIÓN EN EL COLEGIO FRIDA KAHLO

El incidente ocurrió en julio pasado, cuando Laura y su esposo se presentaron en el colegio para agredir física y verbalmente a la profesora. Los agresores no esperaban que las imágenes del ataque se difundieran en redes sociales, la cuales generaron indignación debido a la violencia mostrada, además por el actuar de padre de familia, mismo que llegó armado y amenazando de muerte a la docente en presencia del menor.

Agresión a maestra de kinder en Cuaititlán Izcalli, EDOMEX pic.twitter.com/PNcbAydMFz

— Miñero (@MineroLR) July 19, 2023

La profesora Brenda, al hablar sobre el caso, declaró que ella no era la maestra titular del grupo donde se encontraba el niño, y que al momento del ataque estaba supliendo a otra docente. Además, señaló que los padres de familia no iban específicamente por ella, sino por quien les abriera la puerta. En sus primeras declaraciones, la maestra sugirió que la lesión en el brazo del menor podría haber sido causada por la fricción en una resbaladilla.

LAURA DEFIENDE SUS ACCIONES Y CULPA A LOS MEDIOS

En la entrevista, la madre justificó sus acciones afirmando que actuó para “defender” a su hijo “de lo que sea y de quien sea”. A pesar de considerarse una persona “tranquila”, la madre no pudo contenerse al visitar la escuela y escuchar a su hijo señalar a su supuesta agresora. “No lo pensé, me salió tan de repente”, explicó.

Laura negó haber obligado a la maestra a arrodillarse y pedir perdón, pero admitió haberla golpeado. Criticó la supuesta quemadura en el brazo de su hijo, argumentando que “no había necesidad de hacerle eso”, y responsabilizó a las redes sociales y a los medios de comunicación de arrebatarle a su hijo.

Desde su ingreso al penal, Laura no ha tenido contacto con su hijo de tres años. En su día a día, se dedica a leer la Biblia, esperar la comida, lavar trastes y permanecer “tranquila”. Considera injusto que se le imponga una “sentencia bien larga”, y teme que su esposo reciba una pena mayor a la de un secuestrador, mientras ella podría enfrentar hasta 40 años de cárcel por el delito de extorsión.